¡Alto a las múltiples crisis! ¡Luchemos y ganemos un futuro con igualdad de género!

La Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM) marca la celebración de este año del Día Internacional de la Mujer llamando la atención sobre la difícil situación de las mujeres trabajadoras, especialmente aquellas atrapadas en medio de múltiples crisis y conflictos. Nuestra aspiración colectiva es la de construir un futuro mejor donde la igualdad de género sea una de las piedras angulares de una democracia real. 

 

La historia nos ha enseñado que siempre que hay una crisis o un conflicto social son las mujeres las que llevan la carga más pesada de estas catástrofes. Desde la pandemia del COVID-19 hasta los ataques autoritarios en Myanmar y Ucrania, las mujeres trabajadoras son uno de los sectores más vulnerables a las enfermedades, el desempleo, el abuso y la violencia. Los efectos de la pandemia del COVID-19, el autoritarismo y los conflictos militares han profundizado la desigualdad de género y agudizado la violencia contra las mujeres. Comprender los impactos de género de estas crisis es crucial para dar forma a nuestras respuestas más efectivas, eficientes y justas, tanto ahora como en el futuro.


Sin embargo, incluso antes de estos eventos catastróficos recientes, las mujeres ya se encuentraban en el centro de varias crisis prolongadas y sin resolver: la desigualdad y la violencia de género. A pesar de las victorias históricas obtenidas por las mujeres para promover sus derechos e intereses, muchas siguen siendo violadas, acosadas, cosificadas, perseguidas y discriminadas. En entornos humanitarios, es probable que un asombroso 70 por ciento de las mujeres experimente violencia de género. En el mundo labora, las trabajadoras son las últimas en ser contratadas y las primeras en ser despedidas. Ganan menos que los hombres a pesar de hacer el mismo trabajo. Son víctimas de abuso y violencia en los lugares de trabajo e incluso en sus propios hogares.

 

Ahora más que nunca, los sindicatos deben unirse a diferentes defensores y movimientos de mujeres para derrotar la opresión, la violencia y la desigualdad de género. Debemos desmantelar las raíces culturales y estructurales del sexismo y la misoginia si queremos ganar un futuro en el que todos y todas, independientemente de su género, puedan disfrutar equitativamente de la riqueza y la prosperidad prometidas por nuestras respectivas sociedades. 

 

Así, la ICM hace un llamado a sus organizaciones afiliadas a luchar por más y mejores oportunidades laborales para las mujeres trabajadoras en los sectores de la construcción, materiales de construcción, madera y foresta. Les llamamos a garantizar igual salario por igual trabajo. También exigimos equidad de género en la formación profesional y el desarrollo de habilidades profesionales, así como lugares de trabajo más seguros y saludables. 

 

La ICM también está impulsando un programa de recuperación ante la pandemia que pone el principio de igualdad de género al frente y en el centro de un paradigma de recuperación inclusivo, participativo y empoderador. Dado que las mujeres han sido una de las más afectadas por la crisis sanitaria mundial, es justo que se les dé prioridad en los esfuerzos de recuperación. 


Además, la ICM reitera su llamado a las Naciones Unidas (ONU) para que reconozcan al Gobierno de Unidad Nacional (NUG) de Myanmar y rechacen a la junta militar. También hacemos un llamado a la comunidad internacional para que fortalezca su voz en una fuerte oposición a la invasión de Ucrania por parte de Rusia. 

 

Por último, la ICM sigue comprometida con la eliminación de la violencia de género en el mundo del trabajo. Hacemos un llamado para que más países ratifiquen el Convenio 190 de la OIT para ayudar a poner fin a la violencia y el acoso que sufren las trabajadoras en los lugares de trabajo. Este es un punto focal para que las trabajadoras se organicen y para obtener justicia legislativa y laboral.

¡Mujeres trabajadoras del mundo unidas! ¡Luchemos por un Futuro con Igualdad de Género!