Azerbaiyán condenado a pagar a trabajadores víctimas de trata de personas y trabajo forzoso
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) emitió el 7 de octubre pasado, su tan esperado veredicto en favor de 33 bosnios que demandaron a Azerbaiyán, hace más de una década, por trata de personas y trabajo forzoso.
En el caso de Zoletic y otros contra Azerbaiyán, el tribunal dictaminó que Azerbaiyán no cumplió con su obligación procesal de instituir y llevar a cabo una investigación efectiva de las denuncias de los demandantes en relación con el presunto trabajo forzoso y la trata de personas. El tribunal ordenó a Azerbaiyán que pagara una indemnización a los trabajadores agraviados por daños morales que asciende al valor de 5.000 euros.
El fallo dicta que Azerbaiyán era consciente de que dichos trabajadores son víctimas potenciales de trata de personas y trabajo forzoso. Esta información se puso a disposición de sus funcionarios públicos con base en lo siguiente:
- El Informe ASTRA (basado en el testimonio de trabajadores lesionados y compilado por ASTRA, en cooperación con organizaciones asociadas de Bosnia y Herzegovina y Croacia).
- El Informe de la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI), 2011.
- El Informe del Grupo de Expertos en Trata de Seres Humanos del Consejo de Europa (GRETA), 2014.
Hubo un gran interés mediático por el caso. En el centro de este crimen organizado contra los trabajadores se encuentra SerbAz, una empresa extraterritorial que, según los informes, parece ser propiedad de la familia de un Ministro en Azerbaiyán. Este fue calificado como uno de los mayores casos de trata de personas con fines de explotación laboral en Europa.
Cuando se supo por primera vez sobre el caso en 2009, se organizó inmediatamente una reunión en abril de 2010 en Sarajevo, a la que asistieron la OSCE, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Confederación Sindical Internacional (CSI), la Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM), la organización "Acción contra la Trata" (ASTRA), sindicatos y ONGs con sede en Bosnia y Herzegovina, Serbia, Macedonia del Norte, Croacia y Azerbaiyán.
Posteriormente, se organizó una reunión de seguimiento, a la que asistieron la ICM, el Sindicato de Bosnia y representantes del Consejo de Ministros de Bosnia y Herzegovina. En este espacio, se exigió la protección y justicia para los trabajadores afectados.
Asimismo, el Sindicato Independiente de Trabajadores de Complejos de Construcción de Azerbaiyán (Inshaat-Ish), el Sindicato de Construcción y Materiales de Construcción de Bosnia y Herzegovina (SGIGMBIH), el Sindicato de Construcción, Vivienda y Servicios Comunales de la República Srpska (SGSKRS) y la ICM firmaron un Acuerdo de Cooperación sobre la protección de los derechos de los trabajadores migrantes en Europa del Este.
La ICM expresó su satisfacción con el fallo del tribunal. "Estamos felices de haber contribuido a la justa resolución de este caso, junto con nuestros sindicatos hermanos y ONG asociadas. A pesar de la larga espera, se hace justicia a los trabajadores afectados. Esperamos que esta victoria sirva de inspiración adicional para todos nosotros, al tiempo que continuamos protegiendo los derechos de los trabajadores migrantes", declaró el Secretario General de la ICM, Ambet Yuson.