El Consejo de Federaciones Sindicatos Internacionales (CGU, por sus siglas en inglés), que representa a 200 millones de trabajadores, pidió a los gobiernos y empleadores de todos los países que actúen con rapidez para salvar vidas y limitar la propagación del COVID 19. Se plantea que la crisis es un tema fundamental de salud laboral, seguridad y de derechos y protecciones sociales. 

En una declaración, el CGU dijo que los trabajadores están en la línea frontal de impactos económicos, sociales y de salud del COVID-19. Si los trabajadores no están protegidos, se acelerará la propagación del virus.

El CGU dijo que se deben tomar disposiciones especiales para extender de inmediato los derechos remunerados de licencia por enfermedad a los trabajadores que no los tienen y mejorar las disposiciones de licencia por enfermedad. De igual manera, se deben garantizar las condiciones de trabajo y los arreglos que brindan protección en estos espacios. Se hizo hincapié en que todos los trabajadores deben estar protegidos, independientemente de las relaciones laborales y el Estado.

En este contexto, es vital garantizar que los derechos sindicales estén totalmente protegidos y que se respete la gama completa de normas laborales que cubren las condiciones y los derechos de los trabajadores. El CGU propone lugares de trabajo personalizados, así como responsables directos en la protección de los trabajadores por causa del COVID-19.

El Secretario General de la ICM, Ambet Yuson, enfatizó que: "aunque el diálogo social y la participación adecuada y efectiva de los gobiernos con los sindicatos son siempre importantes, tales prácticas son aún más necesarias en situaciones de crisis. Hacemos un llamado a los gobiernos y empleadores para que trabajen estrechamente con las organizaciones afiliadas a la ICM, con el fin de implementar medidas, programas y servicios que extiendan, no limiten, protejan y garanticen la salud, la seguridad y las condiciones de trabajo de todos los obreros. Esto es especialmente importante para aquellos trabajadores que tienen movilidad y corren un alto riesgo de exponerse en su condición de trabajadores migrantes y obreros de construcción transfronterizos".

Yuson agregó: "El COVID 19 desafía nuestras vidas y nuestra salud, pero también mide la profundidad y la fuerza de nuestros valores, incluido nuestro sentido de solidaridad, comunidad y humanidad. Estamos decididos a desempeñar nuestro papel al abordar esta crisis. Confiamos en que, juntos podemos combatirlo, ayudar a limitar su daño y aprovechar nuestra cooperación para permitir un mayor progreso".  

For CGU’s full statement, please go here: 

https://www.bwint.org/web/content/cms.media/1990/datas/cgu_joint_statement_-_workers_rights_welfare_covid-19.pdf