ICM expresa preocupación por violentos disturbios en medio de pandemia de Sudáfrica
En medio del intento de Sudáfrica de contener la propagación del COVID-19, el país se vio sacudido por disturbios públicos masivos y violencia presuntamente desencadenada por el encarcelamiento del ex presidente Jacob Zuma, quien fue acusado de 16 casos de fraude, corrupción y crimen organizado.
Según varios informes, las multitudes se enfrentaron con la policía y saquearon e incendiaron centros comerciales y otros establecimientos en ciudades de Sudáfrica. Los disturbios han resultado en más de 200 muertos.
Según los informes, el gobierno está trabajando para detener la propagación de la violencia y el saqueo, que se ha extendido desde la casa de Zuma en la provincia de KwaZulu-Natal (KZN), la ciudad más grande del país, Johannesburgo, provincia circundante de Gauteng y hasta la ciudad portuaria de Durban, en el Océano Índico.
La Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM) expresó su seria preocupación por el rápido deterioro de la situación de paz y orden en Sudáfrica. Hizo hincapié en que el malestar público ha tenido un impacto negativo en los servicios de atención médica y de emergencia del país, e incluso ha casi paralizado el despliegue de las vacunas COVID-19 en al menos dos provincias.
El Sindicato Mundial también indicó que no se puede descartar el riesgo de que los disturbios públicos se conviertan en un evento de gran difusión del virus, ya que las personas se mueven en grandes grupos sin tener en cuenta los protocolos de salud y seguridad.
La ICM hizo un llamado al gobierno sudafricano para que aborde las causas fundamentales de los disturbios públicos, como la pobreza, la desigualdad y el desempleo generalizado, y ejerza la máxima tolerancia al tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de las personas.