29 de mayo: los trabajadores y trabajadoras de la República de Argentina tomaron las calles nuevamente en un paro de 24 horas con el motivo de exigir al Gobierno de Mauricio Macri un cambio urgente en su política económica, debido a diversos problemas económicos y sociales que este país enfrenta a causa de la recesión, la devaluación de la moneda y alta inflación.
La decisión se da justo un día después de que representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI) se reunieran con miembros del movimiento sindical argentino para revisar el cumplimiento del acuerdo suscrito en mayo de 2018, en el cual el gobierno de Macri solicitó un préstamo de 56.000 millones de dólares para contrarrestar una grave caída del peso argentino.
"Esta medida de fuerza es un reclamo contra las políticas que empobrecen a los argentinos. Lo que queremos son políticas activas para parar la caída de la economía y que se promueva el empleo de calidad para nuestros trabajadores y trabajadoras" afirmó Gerardo Martínez, Secretario General de UOCRA, afiliado a la ICM en este país.
Desde que el Presidente Macri asumió el poder en 2015, se estima que se han perdido 1.752.000 empleos (9.1 por ciento de desempleo al 2018), la inflación aumentó hasta un 47.6 por ciento en 2018 (la más alta en 27 años) y los índices de pobreza se han disparado alarmantemente hasta un 33.6 por ciento en todo el territorio nacional, lo que representa 13,2 millones de argentinos en condición de pobreza.