Ecuador: Gobierno reprime huelga del pueblo

13 October 2019 14:54

Manifestaciones cada vez más violentas en Quito. Fuente: HispanTV.

Sindicalistas, indígenas, estudiantes, campesinos, maestros, trabajadores públicos y más protestan en Quito y otras ciudades de Ecuador contra las medidas de austeridad anunciadas por el presidente Lenín Moreno. 700 han sido detenidos, al menos cuatro muertos y docenas heridos.

La Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM) expresa su indignación por las recientes medidas represivas tomadas por el gobierno ecuatoriano contra su gente, quienes en justo derecho, han tomado las calles de ciudades de todo el país desde el 3 de octubre. Las movilizaciones diarias se dan como protesta por los esfuerzos del gobierno del presidente Moreno para implementar medidas de ajuste económico, fiscal y estructural, las cuales tendrán consecuencias dramáticas para las poblaciones más vulnerables y marginadas del país.

Las medidas incluyen la eliminación del 100 por ciento de los subsidios al combustible, una reducción anual del presupuesto público en US $100 millones, recortes en los presupuestos de seguridad social de US $50 millones y recortes en los beneficios para los trabajadores del sector público. Las medidas económicas y las reformas laborales se anunciaron después de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, quien proporcionará US $4,2 mil millones para reducir el déficit de este país.

El gobierno reaccionó a las manifestaciones declarando un estado de emergencia. Llamaron a la policía antidisturbios y se desplegaron tanques en el Capitolio. Al menos cuatro personas han muerto, más de 700 personas se encuentran actualmente en la cárcel y decenas han resultado heridas. El presidente Moreno trasladó el gobierno de Quito a Guayaquil para evitar las protestas.

Una de las afiliadas de la ICM en Ecuador, la Confederación de Trabajadores del Sector Público de Ecuador (CTSPE), que agrupa a los trabajadores de los servicios estatales, sector eléctrico, transporte, mantenimiento industrial y enseñanza, citó como peligroso el Decreto de Estado de Excepción emito por el gobierno. Consideran que es un mecanismo de represión y violencia, tal y como lo demuestra la brutal represión contra los ecuatorianos que han estado en las calles desde el 3 de octubre.

El Presidente Moreno se ha opuesto sistemáticamente a los sindicatos del sector público mientras ha estado en el cargo. Se jactó de que 23,000 trabajadores públicos habían sido despedidos durante su mandato y que los contratos no permanentes en el sector público se renovarían con un salario 20% menor al actual.

Representantes de FEDESOMEC y CTC, las otras dos afiliadas de la ICM en este país, quienes representan a operadores de maquinaria pesada y trabajadores de la construcción, también exigen el fin de la represión y la violencia contra el pueblo ecuatoriano.

Los ecuatorianos esperan un diálogo constructivo y una reunión entre el gobierno y los representantes de la coalición de organizaciones que lideran las protestas, con el fin de resolver la situación de inmediato.

La ICM se une al resto del movimiento sindical internacional y pide al gobierno ecuatoriano que desmantele las medidas represivas, se someta a consultas completas con el pueblo ecuatoriano sobre políticas y reformas económicas y entable un diálogo con todas las partes involucradas en este conflicto. Las políticas impuesta están impactando severamente a los trabajadores y sus familias y, en particular, a los sectores vulnerables de la población.

El Secretario General de la ICM, Ambet Yuson, declaró: "La democracia es más que elecciones. Ser elegido no le da a nadie el derecho de ser un dictador. El presidente Moreno claramente prefiere la violencia y la represión a la razón y la discusión. La ICM llama al Presidente a detener inmediatamente los ataques contra su propio pueblo y que procure, por el contrario, hacer las paces con la gente trabajadora que lo llevó hasta donde está".

Personas en las calles de Quito.