El estudio investigó el impacto de la digitalización en el entorno de trabajo en proyectos de construcción, los roles de los trabajadores, capataces y supervisores, los desafíos y oportunidades para esos roles y las oportunidades para el proceso de transformación.
Según el Secretario General de la ICM, Ambet Yuson: “el estudio debe considerarse como una oportunidad para iniciar un diálogo a nivel nacional e internacional con el objetivo de introducir un cambio necesario en nuestra industria. Se requiere tanto voluntad política como un marco político. Para garantizar esto, es esencial que los representantes de los trabajadores desarrollen estrategias que enfaticen en lo positivo".
Guiado por el Grupo Técnico Ad Hoc sobre el Futuro del Trabajo de la ICM y por los aportes de afiliados de la ICM de más de diez países, el estudio analiza los desarrollos tecnológicos, los cambios en los perfiles de trabajo, tiempo de trabajo, salarios, sistemas fiscales, salud y medio ambiente e identifica áreas de actuación y recomendaciones.
Las tecnologías digitales ya no son herramientas puramente de apoyo, pues afectan directamente todas las áreas de operaciones de las empresas. El estudio explica el modelado de información de edificios (BIM), la digitalización de contratación y adquisiciones, los análisis de big data y el "espacio de trabajo virtual común", para los cuales se utilizan nuevas tecnologías en proyectos de construcción, como robots de colocación de ladrillos, impresión 3D, textiles inteligentes con sensores incorporados que adaptan sus características al medio ambiente (E-gloves, etc.), cascos de protección diseñados en realidad aumentada, conectados a Gafas AR, brazos robóticos y robots humanoides. Todo esto suple la necesidad de hacer diseñar planos en el sitio de trabajo directamente, sino que se utiliza nueva tecnología con "información en tiempo real" en un "espacio de trabajo digital común".
El informe destaca la importancia de la protección de datos y derechos personales, ya que existen varias fuentes para el registro de datos personales en sensores de equipos y datos de seguimiento digital procesados para Recursos Humanos, por lo que los trabajadores deben poder determinar qué sucede con sus datos para evitar malos usos de esa información. En términos de adquisición, los requisitos de manejo de datos cambiarán y se debe garantizar la imparcialidad al otorgar contratos.
Si bien la construcción es una de las industrias con menor digitalización en uso, la innovación tecnológica ahora está incorporando nuevas habilidades en el mercado laboral a medida que la construcción digital se vuelve esencial.
En el futuro, se espera que la fuerza laboral sea más móvil y que más mujeres trabajen en la industria de la construcción. Los trabajadores de la construcción podrán trabajar por más años, pero lo más probable es que lo hagan en condiciones diferentes y la escasez de habilidades aumentará en la medida que la tecnología también lo haga.
Uno de los objetivos del Foro de la ICM sobre el Futuro del Trabajo es discutir sobre cómo los sindicatos pueden prepararse para garantizar una agenda "centrada en el ser humano" que incluya activamente, según lo estipulado en el informe de la Comisión Global de la OIT sobre el Futuro del Trabajo, a los obreros y sus sindicatos en este proceso de cambio.
Para la ICM y sus afiliados, se ha vuelto cada vez más importante garantizar que la transición justa en el proceso de digitalización sea parte de las políticas gubernamentales, con el fin de garantizar la protección de los derechos de los trabajadores, la salud y seguridad, así como a al acceso a la educación permanente y mejoramiento de habilidades.