En este 1° de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, la ICM reconoce que todos los trabajadores de primera línea entre ellos los trabajadores de la construcción, de la madera y de la silvicultura desempeñan un papel importante para apoyar los servicios esenciales. Muchos trabajadores salen cada día arriesgando la exposición al COVID-19. Algunos de ellos pagan el precio final con su vida para mantener las cadenas vitales de producción y suministro funcionando, incluyendo suministros médicos y alimentos.
Hoy reconocemos a los trabajadores a través el mundo y el valor que aportan a nuestra sociedad. Los sentimientos de solidaridad, incluso con el distanciamiento social, han crecido con la comprensión de la necesidad de mejorar los salarios y las condiciones de trabajo seguras. Pero cada vez más, los trabajadores están sin relaciones laborales, sin seguridad laboral y son numerosos a trabajar en la economía informal. Hay millones de trabajadores pobres que dependen en gran medida de los salarios diarios. Las trabajadoras de la construcción y de la madera son las que sufrirán más de la pérdida de medios de subsistencia. Los trabajadores migrantes corren un mayor riesgo de contraer infecciones, ya que a menudo están hacinados en el trabajo y en sus alojamientos. A medida que la crisis crece, muchos de estos trabajadores son incapaces de sobrevivir y no son sólo los ingresos que faltan, sino también la atención de la salud, las protecciones sociales y otra seguridad básica.
Los trabajadores tienen poco poder, pero juntos, en el sindicato, pueden progresar. Los trabajadores organizados en sindicatos son más seguros y capaces de defender sus derechos. Los sindicatos han podido negociar con las empresas, y en particular con las multinacionales, que los trabajadores mantengan sus puestos de trabajo y que sus ingresos sean seguros. El hecho de que los trabajadores organizados cambien el equilibrio de poder, les ayuda a ellos y a sus comunidades. También sustenta la democracia.
El poder del Día de los Trabajadores es que se extiende más allá de las fronteras; que a medida que los trabajadores toman la calle en un país, saben que hay otros en el mundo haciendo lo mismo. Pero este año será diferente, por primera vez en más de un siglo, los trabajadores no tomarán las calles. La pandemia COVID-19 podría mantenernos fuera de las calles, pero no necesitamos ser silenciosos.
Para el Día Internacional de los Trabajadores, el 1° de mayo de 2020, la ICM llama a tomar acción. Hoy nos comprometemos a luchar por un mundo en el que antepongamos la vida a las ganancias. Un mundo libre de explotación, hambre y miseria. Un mundo con igualdad y dignidad para todos.
El afiche en inglés y otros idiomas que no son oficiales.