La Federación de Trabajadores de la Construcción y la Madera de Pakistán (PFBWW) ha expresado su preocupación por la salud y la seguridad de los trabajadores que continúan laborando en proyectos de construcción vinculados al Corredor Económico China-Pakistán (CPEC). Si bien gran parte de Pakistán está en cuarentena, algunos proyectos continúan operando. El sindicato identificó los proyectos Suki Kinari y Karot Hydro como algunos de los sitios que carecen de medidas de seguridad.
"Nuestros afiliados que trabajan en los proyectos de CPEC están extremadamente preocupados por la pandemia. No se han realizado pruebas de COVID-19 en ninguno de estos proyectos, el distanciamiento social es casi imposible tanto en el trabajo como en los campos de estadía y el equipo de protección personal sigue siendo inadecuado", dijo el Secretario General de PFBWW, Aslam Adil.
"La vida de los trabajadores en los proyectos de CPEC ya es miserable, los líderes sindicales son perseguidos, se niega la negociación colectiva y los empleadores regularmente no brindan ni siquiera los estándares mínimos establecidos por la ley paquistaní", agregó Adil.
El gobierno considera que la industria de la construcción es uno de los principales caminos de Pakistán para la recuperación económica posterior a la crisis. Recientemente, el gobierno ha anunciado un paquete de desgravación fiscal, apoyo financiero y asistencia regulatoria para la industria de la construcción.
Sin embargo, Adil expresó su preocupación ante la noticia de que el gobierno no haya anunciado ninguna medida que salvaguarde los derechos de los trabajadores en ambientes de trabajo seguros y condiciones dignas de trabajo.
"Son los trabajadores los que han construido este país y son los trabajadores quienes lo ayudarán a recuperarse. Pero no podemos hacerlo sin nuestros derechos fundamentales protegidos de igual manera", dijo Adil.