Un trabajador de la construcción fue trasladado al Hospital Royal Perth el 20 de octubre de 2017 después de que una grúa colapsó en las líneas eléctricas en un sitio de trabajo en Bayswater. Se cree que el hombre estaba trabajando en un proyecto de túnel cerca de la estación de trenes de Bayswater, la cual forma parte de Forrestfield-Airport Link, un proyecto de empresa conjunta administrado por la multinacional italiana de la construcción Salini Impregilo y la firma australiana NRW.
Si bien inicialmente se creía que el hombre herido era un operador de grúa, más tarde se reveló que el hombre era un cazador de grúas (conocido en Australia como un "dogger"). El rol del cazador es guiar la grúa y unir cargas a la máquina; sin embargo, las cosas salieron mal cuando la grúa colisionó con una línea de energía de 132,000 voltios.
Actualmente se cree que el hombre se encuentra en una condición estable. Las autoridades, incluido el regulador australiano de seguridad y salud en el trabajo, WorkSafe, están investigando el asunto.
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