Venezuela, país caracterizado durante años recientes por enfrentar una dura crisis social, política y económica, asegura el pago de salarios durante este periodo tanto en el sector público como en el privado. Sin embargo, los sindicatos llaman la atención al hecho de que, si bien esta iniciativa protege a trabajadores de la construcción y madera bajo contrato formal, la medida deja sin protección a los obreros independientes e informales, que representan el 90% de la mano de obra de construcción en la actualidad.
El 20 de febrero, los sindicatos habían logrado la firma de un nuevo Convenio Colectivo con la Cámara Venezolana de la Construcción, el aseguraba un incremento salarial de 500% como una medida urgente para hacer frente a la desproporcionada inflación del país. No obstante, este incremento continúa siendo insuficiente en comparación con el costo de vida actual del país.