Solidaridad con Türkiye
El 6 de febrero, un terremoto de magnitud 7,8 sacudió Türkiye temprano en la mañana. Fue uno de los terremotos más mortíferos del siglo, con más de seiscientas réplicas registradas, incluida una réplica de magnitud 7,5. La calamidad ha afectado a 14 millones de personas que viven en diez ciudades del sudeste de Türkiye.
Más de 12.000 personas han perdido la vida y más de 62.000 personas resultaron heridas. Un total de 6.444 edificios también se han derrumbado. Decenas de miles de personas siguen atrapadas bajo los escombros, mientras que un número similar de personas están sin refugio y expuestas al clima helado del invierno.
Nuestros afiliados están monitoreando actualmente la situación y las necesidades vitales de sus miembros coordinando sus esfuerzos con las autoridades. El presidente del Sindicato Turco de Trabajadores de la Construcción y la Construcción de Carreteras – YOL-IS y miembro de la Junta Mundial de la ICM y vicepresidente regional paneuropeo, Ramazan Ağar, llegó a la región afectada en las primeras horas después del terremoto y actualmente está coordinando los esfuerzos de respuesta.
Decenas de miles de miembros de YOL-IS, especialmente aquellos que trabajan en empresas públicas de diferentes provincias, llegaron a las áreas afectadas por el terremoto y actuaron como primeros respondedores. Han estado a la vanguardia de las operaciones de rescate. A costa de perder la vida, mantuvieron abierta la red vial del país y repararon la infraestructura vial dañada en medio del severo clima invernal para garantizar el paso seguro del personal de emergencia, los voluntarios y el suministro. El presidente del Sindicato de Funcionarios Forestales, Agrícolas, Ganaderos y Ambientales – TARIM ORMAN-IS, Şükrü Durmuş, también llegó a las zonas afectadas y visitó cuatro ciudades importantes donde se encuentran los miembros del sindicato para ayudarlos en sus esfuerzos de evacuación.
Como parte de nuestros esfuerzos de ayuda, los sindicatos de Türkiye han llamado a sus miembros y trabajadores en general a donar todo lo que puedan para sostener nuestra iniciativa. En cooperación con nuestros afiliados sobre el terreno y con la ayuda del fondo de solidaridad, nos aseguraremos de que las necesidades vitales de todos los afectados por la calamidad se aborden suficientemente.